En el sector público, 3 de cada 10 nacimientos se produce por cesárea, mientras que en el privado, la cantidad de intervenciones se duplica. El ministerio de Salud bonaerense capacita a los equipos sanitarios para que conozcan los beneficios del parto natural y velen por el cumplimiento de la ley de parto respetado.
En la Semana Mundial del Parto Respetado, el ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires instó al equipo sanitario a velar por el cumplimiento de la ley nacional 25.929, y a propiciar las mejores condiciones para que las mujeres den a luz mediante el parto natural, y así evitar los riesgos que entrañan las cesáreas cuando no tienen una adecuada indicación médica.
Por eso, la ministra de Salud, Zulma Ortiz, recordó hoy que “toda mujer en relación al trabajo de parto, parto y postparto tiene derecho a ser informada sobre las distintas intervenciones médicas, de manera que pueda optar libremente cuando existieren diferentes alternativas”, tal como explicita el artículo 2 de la ley de parto respetado.
La tasa ideal para la Organización Mundial de la Salud indica que las cesáreas no deberían superar el 15 por ciento de los nacimientos. No obstante, por múltiples motivos, como la elección de la embarazada, cuestiones de organización en las maternidades, temor del equipo sanitario a no poder enfrentar una emergencia obstétrica y a las demandas legales, e incluso por no dar a conocer las ventajas del parto natural a las embarazadas, en los hospitales públicos de la Provincia, 3 de cada 10 partos se realiza por cesárea, mientras que en el sector privado esa proporción se duplica y asciende a 6 de cada 10.
Los especialistas del ministerio de Salud provincial explicaron que una cesárea sólo debería realizarse cuando los beneficios de hacerla superan los riesgos. En la mayoría de los casos, el parto natural implica múltiples beneficios para la madre: mejora su presión arterial, el aporte de oxígeno a la placenta y al recién nacido, mantiene estables los niveles de glucosa en sangre y la recuperación de la mujer es mucho más rápida, ya que en 48 horas pueden regresar a su hogar.
Para el bebé, incluso, es mucho mejor: le permite liberar de líquido los pulmones con más facilidad, mejora su oxigenación general y cerebral, aumenta el alerta y puede dormir en la habitación con sus padres inmediatamente. De este modo, gracias al apego inmediato, se favorece la producción de leche en su mamá.
Los datos sobre cesáreas que aporta la Dirección de Información Sistematizada del ministerio de Salud bonaerense, sirven de muestra para dar cuenta de una realidad conocida por todos: aunque puede salvar vidas, la cesárea se realiza a menudo sin necesidad, hecho que coloca a las mujeres y a sus bebés en riesgo de problemas de salud a corto y a largo plazo.
CUÁNDO SÍ ES NECESARIA
Desde la dirección de Maternidad e Infancia del ministerio de Salud provincial explicaron que la cesárea es indicada cuando el parto vaginal implica un riesgo para la madre o el bebé, por ejemplo, un trabajo de parto prolongado, enfermedades maternas concomitantes con el embarazo o complicaciones en la gestación, sufrimiento fetal o que el bebé se presente en una posición anormal. Sin embargo, no dejan de ser intervenciones quirúrgicas que pueden causar riesgos.
Desde el año 2004, existe en nuestro país la Ley de Parto Respetado, que garantiza una serie de derechos para las mujeres, como la elección de quien la acompañará durante el parto, y prioriza el parto natural por sobre la cesárea.
“El término parto respetado o parto humanizado hace referencia a una modalidad de atención en consonancia con las necesidades y deseos de la familia que va a dar a luz”, explicó Elsa Andina, subsecretaria de Contralor del Conocimiento, Redes y Tecnología Sanitaria del ministerio de Salud, quien durante nueve años dirigió la maternidad Sardá. Agregó que, es además, uno de los ejes de la estrategia “Maternidades Seguras y Centradas en la Familia (MSCF)” que impulsó la ministra Ortiz y de la que ya forman parte 66 maternidades públicas de la provincia de Buenos Aires.
Por esto, insisten, brindar apoyo a la embarazada y a su familia durante el control prenatal, respetar sus decisiones en el trabajo de parto y en el parto, priorizar la internación conjunta madre-hijo y facilitar la inclusión de madre, padre y familia en la internación neonatal, son algunas de las medidas que impulsa el ministerio de Salud de la Provincia en las capacitaciones al equipo de salud.
Según datos del Sistema Informático Perinatal (SIP) del ministerio de Salud provincial correspondientes a 2015, el 51.6% de las mujeres eligen estar acompañadas durante el trabajo de parto, el 93.9 por ciento elige dar a luz acostada; el 5.9, sentada y el 0.2 en cuclillas.
El 51.6% de las mujeres eligen estar acompañadas durante el trabajo de parto. El 93.9% elige dar a luz acostada; el 5.9%, sentada y el 0.2% en cuclillas, según datos del Sistema Informático Perinatal (SIP) del ministerio de Salud provincial correspondientes a 2015.