Este viernes por la tarde familiares, amigos y vecinos del barrio Atalaya de Isidro Casanova, se manifestaron en las calles del centro comercial exigiendo justicia por la muerte del pequeño Franco Torres, asesinado el pasado 24 de septiembre.
Franco fue asesinado por delincuentes que momentos antes asaltaron una agencia de seguros de la zona, de donde se llevaron unos 160 mil pesos, dispararon contra un auto Chevrolet Meriva, gris, en la que viajaban Franco Torres y su papá Gabriel -rumbo al club 12 de Octubre, de Isidro Casanova, donde el chico jugaba al fútbol- pensando que era la víctima del robo que salió a perseguirlos. Uno de los disparos dio en la cabeza del nene -que estudiaba en la escuela 117-, lo que le causó la muerte casi en forma instantánea.
A uno de los ladrones, que escaparon en un auto Citroën C4, se les cayó el arma que fue sometida a distintas pericias, lo que permitió la detención de los dos imputados que fueron puestos a disposición del fiscal José Luis Maroto.