Expertos manifestaron que “muchas de las emociones que van a estar dando vuelta en la escuela no es el contagio, sino el miedo social. Se instaló el cuidado desde el miedo, eso es lo que hay que regular”, dijo a Télam Marilina Rotger, profesora y especialista en neuroeducación.
Especialistas en salud mental infantil, sugirieron la creación de un protocolo emocional para que alumnos, docentes y familias puedan enfrentar los miedos y gestionar emociones ante el inicio de las clases presenciales en las escuelas.
La idea principal es afrontar los miedos producto del aislamiento por la pandemia “no interrumpan los procesos de aprendizaje” ni entorpezcan “el reencuentro y la resocialización de los alumnos”.
Un estudio efectuado por Unicef, el Instituto de Neurología Cognitiva (Ineco) y el gobierno porteño, a mediados del año pasado, reveló que durante el aislamiento se incrementó la irritabilidad en los niños quienes se volvieron muy dependientes de sus padres, expresando su temor de contactarse con los demás, mientras que entre los adolescentes prevalecieron las sensaciones de desánimo, baja confianza en el futuro y decaimiento afectivo.